Sustentabilidad en cifras

Ahorrados más de 930 millones de litros de água y evitada la emisión de 344 toneladas de CO2 eq. a la atmósfera, además de otros impactos positivos. ¿Y si fuera posible tener acceso a una herramienta que ayuda a reducir impactos ambientales y disminuir los costos? Es lo que ha estado haciendo la Fundación Toyota desde hace 10 años a través del Proyecto Ambientação. Y para materializar los impactos ambientales y económicos directos e indirectos, mostrando la dimensión de los resultados alcanzados, la Fundación Toyota do Brasil encontró una sólida asociación en la Fundación Espaço ECO® (FEE), consultoría instituida y mantenida por BASF para proyectos de sostenibilidad.

El proyecto Ambientação utiliza una metodología propia de la ensambladora para resolver problemas y difundir prácticas sostenibles. Ampliamente aplicada en el cotidiano de la empresa para reducir el consumo de recursos naturales y llevar a cabo la gestión de residuos, la metodología también puede ayudar a solucionar cualquier tipo de cuestión.

Para que la FEE pudiera medir los resultados del uso de la metodología, se seleccionaron 47 iniciativas en la región metropolitana de las ciudades de Campinas y Sorocaba, incluida Indaiatuba, todas en el estado de São Paulo, donde nació el Proyecto Ambientação. “A través de esta asociación pudimos ofrecer una visión general de los impactos en toda la cadena. Es una gestión ampliada, que mejora aún más las acciones”, explica Max Silva, de la Fundación Espaço ECO®.

Según la presidenta de la Fundación Toyota do Brasil, Viviane Mansi, los cálculos reflejan los beneficios para toda la sociedad. “Esta asociación también fue fundamental para nosotros. Demostrar los resultados de esta iniciativa en números tangibles nos ayuda a comunicar más y mejor los logros del Programa”.

“Suelo decir que es el tipo de matrimonio perfecto. Además de mostrar que los resultados van más allá de lo que el documento puede señalar, alentamos a otras empresas para que se asocien en pro del desarrollo sostenible”, refuerza Elaine Marucci, mentora y coordinadora del proyecto Ambientação en la Fundación Toyota do Brasil.

Los datos de la FEE permiten ver que las actividades diarias y comunes están directamente relacionadas con el cambio climático. Un ejemplo de esto son las emisiones de gases de efecto invernadero, conocidas como emisiones de carbono, que ocurren cuando se utiliza energía en la cadena de suministro de agua.

Resultados – Con la cantidad total de agua ahorrada, sería posible lavar la ropa de 358 mil personas, es decir, alrededor del 35% de la población de Campinas, considerándose un ciclo de lavadora por semana para cada persona. El ahorro de energía, a su vez, podría mantener a 827 hogares por un año. Cuando se trata del CO2 no emitido, la cantidad es equivalente a dos horas de todo el transporte por carretera en Campinas, según datos del inventario municipal de gases de efecto invernadero. Los resultados del proyecto Ambientação estiman un ahorro de 3,7 millones de reales a las arcas públicas a lo largo de 10 años del proyecto.

Según datos del Instituto Trata Brasil, que corroboran la importancia de esta asociación, el costo del agua desperdiciada en un año en Brasil alcanza los R$ 11 mil millones. De toda el agua tratada en el país, la mitad se desperdicia debido a fallas en la estructura de suministro.

Entre los beneficiarios del proyecto se encuentran estudiantes y personal de la escuela de enseñanza fundamental Maria Elza Lazara Lopes, la más grande de la ciudad de Capela do Alto, en la región metropolitana de Sorocaba. Utilizando la capacitación de la Fundación Toyota, fue posible identificar que la cocina local consumía un promedio de 45 mil litros de agua por mes al lavar platos y limpiar alimentos para 740 personas.

Con la aplicación del método, la escuela decidió cambiar los platos de plástico, que son más difíciles de limpiar, por platos de loza, que requieren menos agua para la higiene. El cambio del material proporcionó ahorros del 20% en el consumo diario de agua.

Asociación automotriz – BASF suministra, a nivel mundial, distintos insumos que forman parte de los vehículos Toyota. En Brasil, la asociación con la Fundación Espaço ECO® proporcionó una relación más estrecha entre las dos compañías, una vez que el mercado comprendió el enfoque de ambas en la sostenibilidad. Según Ariane Marques, química y consultora de estrategia del equipo de Industria Automotriz de BASF para América del Sur, esta relación “permitió una apertura con el equipo de sostenibilidad de la ensambladora, además de conocer y anticipar tendencias y necesidades del mercado automotriz”.

Este es el Modo Y de BASF, que une productividad Y sostenibilidad. Así es que crea química para un futuro sostenible y contribuye a un mundo que ofrezca más calidad de vida para todos.

Esta asociación cumple plenamente con muchos Objetivos de Desarrollo Sostenible indicados por las Naciones Unidas:

• ODS 6, que busca garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos
• ODS 11, de hacer que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles
• ODS 12, cuyo objetivo es asegurar modalidades de producción y consumo sostenibles
• ODS 17, de fortalecer los medios de implementación y revitalizar la alianza mundial para el desarrollo sostenible.